Descué.

Descué.

1. El Descue.

Quieren un descué/ pero quieren todo complé/ 

Entonces damos de má/  y cobramos la mitá/. 

En este mundo globalizá/  nos tenemos que peleápor tener alg/
de lo que nececitá/. 

Damos much/  recibimos poc/. 

Un mundo insatisfé/  por dar de má/  y recibir de men/. 

Yo no pued/
dar de men/
y a veces prefiero no deseá/  más de lo que pueda manejá/. 

Quiero pará/  antes de terminá/ hecho mil pedá/. 

(Escribí este poema en febrero del 2012, poco después de cerrar un emprendimiento que no funcionó. Estaba enojado. Trabajé much, pero cobré poc.).

2. El chisme. 

- Güey, ¿Viste que un artista pegó un plátano en la pared y lo están vendiendo en US$120,000?

- ¿Cómo se atreven? 

- Galeristas estafadores.

- Millonarios tontos. 

- Eso lo puede hacer cualquiera. 

- Oye, ¿Pero si supiste que luego llegó otro artista y se comió el plátano?

- Bueno, Marizio Cattelan ya había pegado a un galerista con ese mismo tipo de cinta. Lo hizo en el 99, antes de que hubiera redes sociales y memes. 

- Güey, el mejor MEME fue de Carrefour, Publicaron los precios de sus frutas y verduras así con la cinta. Güey, súper rápidos. Así tiene que ser. 

- Güey, y luego el Zapata Gay de Bellas Artes. ¿Qué pedo con el arte?

- Güey, todo es una cortina de humo. 

3. El regateo. 

Me cuesta pensar que Maurizio Callelan y su galería pudieran calcular la explosión de memes y opiniones a partir de la pieza presentada en el Art Basel Miami Beach.

Lo que veo es que a muchos nos duele la forma en que opera el capitalismo y la manera en que se asigna el valor a las cosas. 

Me queda claro que US$120,000 son una provocación. Pero creo que todos los memes tenían un subtexto, “esa pieza no vale eso, están locos”. 

Una ola de nuevos tasadores de arte salió a sentenciar el precio que acompañaba la desconcertante pieza. 

Vaya, una cosa es lo que pasa con una pieza que se presenta en una feria cara, por una galería cara, con un artista millonario vendiendo a coleccionistas millonarios. Pero, ¿Qué pasa cuando se trata de una camiseta en un mercadito?, ¿Qué pasa con una cotización en la que se pide precio de amigos?, ¿Qué pasa cuando no encontramos verdaderas ofertas en El Buen Fin?

Creo que todos estamos metidos en este sistema de observar precios y buscar la forma de obtener el mejor trato. Le pedimos un descuentito al del mercadito, de la misma forma que se le pide a Maurizio Cattelan que le baje a su payasada de vender un plátano en una millonada. A veces pedimos el descuentito, a veces nosotros somos los que lo tenemos que dar.

Todos quieren desué/ aunque ni les interese comprá/. 

Quifijofotefe

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CASA

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