Rabia.
Por El Poder del Grayskull o por Los Antiguos Espíritus del Mal; llega un punto en el que tenemos levantar la frente y desatar la fuerza, para que pasen las cosas que tienen que pasar.
Este momento raro que vivimos, que creo que nos tomará años digerir, nos tienen a todos conteniendo o desatando explosiones por aquí y por allá. Todos estamos frustrados con justa razón. Todos vamos encontrando la forma de desatar esa fuerza. Hemos pasado de los cuestionamientos a los ataques. Ese presidente está mal por lo que decide. Ese director técnico está mal por sus alineaciones. Ese grupo de amigos está mal por sus reuniones de los fines de semana. Invocamos al Poder de Greyskull o a los Antiguos Espíritus del Mal para sacar la rabia, ante la recesión económica y la incertidumbre sanitaria.
Supongo que el asunto no es dejar de enojarnos. Todos necesitamos ese grito para sacar esa rabia. Igual que He-Man y Mumm-Ra tenían su grito, la semana pasada me topé con una imagen de The Weeknd haciendo lo suyo en lo alto de un rascacielos. La canción que interpretaba, es sobre un hombre desesperado ante la soledad y la imposibilidad de estar con la persona que quiere. Con un gesto muy parecido a los gritos que mencionaba, lanza un ¡New York City! que enciende la ciudad por una canción de amor.
Tuve una videollamada con H3MBRA hace unas semanas y platicamos sobre su obra. Un trabajo lleno de colores, texturas, materiales y explosiones. Me contó sobre sus procesos y su forma de pensar.
Al platicar sobre su camino como artista, ella lo traza desde su niñez. Comprendía que llegó un planeta con una serie de reglas que no funcionaban para ella. Esto la llevo a un proceso de aceptación que no solo implica conocerse a sí misma, sino a todo lo que la rodea. No importa si es una persona, un animal, una planta o un material, ella se permite observarlos y experimentar para conocerlos mejor.
En su trabajo regularmente hay experimentación con materiales de que reaccionan entre sí. Que explotan, que se rechazan, que hay que darles sus tiempo para comprender la forma en la que pueden convivir y por fin quedar en paz. Un serie de explosiones que en un punto se convierte en armonía.
Tengo la esperanza de que en este momento en el que se están desatando tantas fuerzas contenidas, no todas sean violentas. Ojalá que también se den explosiones por canciones de amor, obras de arte o cualquier canalización de energía para mejores fines.
Les dejo esta pieza de H3MBRA en la hace referencia a un texto de este blog.
